Shared Memories (Relaciones)

Shared Memories

Si se pudiese definir a esta hermosa mujer en tres sencillas palabras, podría ser la siguiente combinación: ambiciosa, terca y apasionada. Bianca es una mujer que ha tenido que lidiar por sí sola con la porquería de mundo que le tocó afrontar desde que hace uso de memoria. Una primera impresión parte inicialmente de lo que ella vea en la persona que esté enfrente suyo: si es un potencial cliente, le tratará de una manera encantadora, sonreirá a menudo (aunque no lo haga de corazón) y con los dotes de elocuencia que bien se ha ganado al pasar de los años es capaz de convencer hasta al más escéptico para que compre la droga que ella misma administra. Si por el contrario es una amenaza, ni siquiera lo pensará para hacerse valer y acabar con dicho sujeto a toda costa; esta norteamericana ha tenido dolorosas experiencias que la han llevado a justificar una muerte con sus propias manos, siempre y cuando lo haya hecho por defensa propia o venganza. Si el sujeto es apenas un conocido que no representa las dos anteriores situaciones, Bianca le tratará sin mucha importancia, se mostrará constantemente absorta en sus pensamientos y apenas responderá al sujeto sólo lo necesario.

Respecto a su labor como traficante, Bianca asemeja un león que protege a capa y espada su territorio. Generalmente se repite a sí misma que las tareas más indispensables las debe hacer por si misma porque de lo contrario no se harán bien. Al haber construido con el sudor de su frente aquel “pequeño imperio” desde que era relativamente joven, el narcotráfico se ha convertido en un punto neurálgico de su vida. Por ende, se le ve generalmente enfocada en sus negocios al menos un par de horas todos los días de la semana. Así que aquellos planes en los que ella pueda pasar un momento de tranquilidad a las afueras de la ciudad tienen una casi nula posibilidad de darse. Dado lo anterior, cualquiera podría pensar que esta mujer se centra únicamente en el dinero. Sin embargo, ella no es avara… sencillamente esta labor le representa mucho dado que fue la única cosa que ella pudo construir por si misma; ha sido la primera y única vez en la que ella no se ha sentido explotada como en el pasado. Evidentemente esto no es algo que lo sepa todo el mundo… de hecho, nadie más lo conoce salvo ella, tomando aquel motivo como el motor que le impulsa a realizar sus negocios. A grandes rasgos, la osadía y sobre todo la terquedad que ha demostrado cuando se trata de esta esfera, hace que sea vista como una mujer muy cascarrabias, autoritaria, eficiente y extremadamente ambiciosa.

En cuanto a su parte personal, esta pelinegra no se conoce justamente por sus habilidades para tener amigos por doquier. Tendrá contactos, aliados, subalternos y jefes… pero personas a las cuales ella pueda confiar, casi nadie. Primeramente aquellas personas NO se deben relacionar con sus negocios porque ya bien sabe esta mujer que cuando hay dinero de por medio, las relaciones no florecen ni una pizca. Lo segundo es que Bianca no suele hablar de sus negocios con sus más allegados a menos que el asunto sea estrictamente necesario; de resto sólo prefiere compartir un momento que le distancie un poco de su día a día. Generalmente es protectora y atenta con ellos, intentando no verse tan emocional al hacerlo para no comprometer su parte más voluble. Sincera, medianamente respetuosa (a menos que le saquen de quicio) y dará la mano siempre y cuando sepa que puede confiar cien porciento en aquel que ayuda.

Como último aspecto pero no menos importante, Bianca se caracteriza por sus eternos choques en varios aspectos de su vida. Por ejemplo, su autocontrol es el rasgo más relevante en ciertas situaciones de riesgo, pero de un momento a otro se puede tornar en un deseo innegable de explotar y acabar con todo lo que está a su alrededor. Adora la independencia, aunque a veces siente entera dependencia por alguien cuando se encuentra enamorada, al punto de dar lo que sea para complacerle. A pesar de los extremos contradictorios que ella misma experimenta, hay un elemento que siempre ha permanecido constante en su vida: ese sentimiento de soledad lo lleva consigo como si fuese una especie de estigma que no dejará de traer consigo por el resto de su vida, si es que no le arrebatan la misma por el riesgo que ha corrido bajo estos entornos.